Situación administrativa

Pese a que la Raza Caprina Pirenaica ha sido profusamente citada desde la bibliografía zootécnica más clásica (Sansón, 1903; Aparicio, 1947) e incluida siempre en los listados nacionales e internacionales de razas de ganado, ha recibido muy poca atención por parte de las administraciones, técnicos y criadores. Todo ello puede constatarse en la vaguedad de los censos oficiales (apareciendo incluso como “Raza de Fomento” en el Catálogo Oficial de Razas de Ganado desde 1979 hasta 1997), en su falta de selección productiva y en los intensos cruzamientos que han sufridos sus poblaciones, que la han colocado en una situación censal crítica.

El Catálogo Oficial de Razas Autóctonas Españolas editado por el MAPA, en su Volumen I dedicado a las especies Ovina-Caprina (Estéban y Tejón, 1986) determina un censo para la Raza Pirenaica de casi 50.000 cabezas y realiza una caracterización morfológica y productiva de la misma. También en 1986, SERGA establece un censo de 63.192 hembras y 2.367 machos de la raza.

 

 

 


Sierra Alfranca (1987) subraya su potencial productivo y su rusticidad, y establece un censo en Aragón de unas 10.000 cabezas, pero incidiendo en la tendencia negativa en el número de efectivos, los muchos cruzamientos que soportaba la raza y la necesidad de trabajar en su selección y recuperación.

En 1997, el MAPA (Real Decreto 1682/97) reconoce el riesgo en que se encuentra la Raza Pirenaica y la incluye en el apartado de Razas Autóctonas de Protección Especial en la modificación que se hace del Catálogo Oficial de Razas de Ganado de España.

En Francia, la Raza Caprina Pirenaica está considerada en peligro de extinción aunque goza de un programa de conservación coordinado por el INRA de Toulouse y el Institut de l’Elevage. En 1993, el Institut de l’Elevage determina la existencia de apenas un millar de cabezas, dispersas por el Pirineo central y occidental, bajo la grave amenaza de la “alpinización” o absorción por la Raza Alpina Gamuzada (Audiot, 1995). En 2009, el Conservatoire du Patrimoine Biologique Regional de Midi-Pyrénées aporta la cifra de 2.800 hembras y 220 machos en 185 ganaderías.

En España, la raza Pirenaica sólo está reconocida oficialmente en Aragón, cuyo Gobierno ha aprobado su Libro Genealógico y su Prototipo Racial. Sin embargo, ARACRAPI recibe todos los años numerosas peticiones de ganado de otras áreas donde antes tuvo presencia la raza, como Cataluña, Navarra, País Vasco, Castilla-León,… e incluso Galicia, lo que indica la existencia de un interesante potencial de crecimiento.